En los últimos años, he ayudado a personas con estilos de vida diferentes a desarrollar el hábito de la lectura. Lo hago de manera personalizada, pero eso no quita el hecho de que haya tomado algunos de los consejos más poderosos que he descubierto para traerte este artículo. Si quieres ser lector, aplícalos.

Está comprobado que funcionan.

1. Elige un libro sobre un tema que te guste

Si un libro no te gusta ni te llama la atención, se convertirá en un excelente método para ver la lectura como aburrida. Sí, hay ocasiones en las que te imponen lecturas para que mejores en tu trabajo, pero eso solo añade presión. Por eso recomiendo que leas lo que te gusta, lo que te motive, aquello que te sumerja en tu propio universo: una novela, un libro de autoayuda, un libro de recetas (porque te encanta cocinar)… ¡Las opciones son ilimitadas!

2. Abandona tus lecturas

Concluir lo que empezamos es un tabú. Tenemos muy poco tiempo como para que lo perdamos leyendo algo que no nos gusta. Si el libro te aburre, déjalo. Hay veces en las que simplemente no era para ti, otras donde podrás retomarlo semanas, meses o años después. Abandónalo y busca el siguiente.

3. No te compares

Las personas que leen varios libros al mes no deben ser tu modelo de lector. Cada quien es diferente en gustos, ritmo de lectura e intereses ajenos a los libros. Quizá tu pasión es el baile, lo que está excelente: entonces se comprende que para ti la lectura no obtendrá la atención y el tiempo que alguien a quien sí le apasiona. No debes compararte.

Tú ya eres lector por poner esfuerzo en el hábito a tu manera.

4. Celebra tu avance

No importa si solo has leído un párrafo, una página o diez capítulos… Todo cuenta y todo suma en tu proceso. ¡Celébralo!

5. Libérate de la culpa

Habrá días, semanas y meses en los que no se te apetecerá leer (bloqueo lector), te costará o no tendrás el tiempo disponible. Eso es normal, todo lector lo ha vivido. ¡NO TE CULPES POR NO LEER!

6. Siempre habrá una opción para ti

Hay lectores que prefieren novelas, otros, cómics, otros, libros de no ficción y, unos más, guiones o dramaturgias. Algunos aman leer en papel, otros, en lectores digitales y, unos más, en audiolibro. Encuentra el género literario y el medio de lectura con el que te sientas más cómodo. ¡QUE NADIE TE DIGA QUE HAY UNA SOLA OPCIÓN!

7. Comparte un poco de lo que lees

Los libros nos hacen pensar y revuelven nuestras emociones. Guardarnos todo eso provoca ansiedad, por lo que te recomiendo que, al igual que le cuentas a alguien más sobre esa película que amaste u odiaste, hagas lo mismo con lo que leíste: háblalo, sube una publicación a Facebook, escríbelo en tu diario o graba un video. Eso te liberará para seguir con la lectura.

8. Haz tuyo el libro

Lo compraste y es tu posesión, no tiene por qué quedar como si fuera a revenderse. Subraya las frases que te gustan con distintos colores, escribe tus pensamientos en los márgenes, colócale post-its y más. Este tipo de acciones te conectarán con el libro porque tendrá pequeñas partes de ti. ¡HAZLE LO QUE QUIERAS!